Mira que lo llevan anunciando hace un tiempo, con alguien más querido que Papá Noel, el mismísimo Rafa Nadal, que si cuenta ONE, que si somos los mejores y los que más te queremos, que si te regalamos avíos (sea lo que sea un puñetero avío)... La cosa es que, detrás de tan motivantes anuncios se escondía una advertencia que hasta hoy no me ha dado por leer con detenimiento: van a pasar de cobrarme 0 € de comisiones a endiñarme 120 o 240 € al año. Porque ellos lo valen.
Llevo dos décadas en este banco: hace veinte años, cuando terminé la carrera y me fui de mi ciudad natal a otra más grande, con una mano delante y la otra detrás, no me abrí una cuenta en la caja de ahorros donde mi familia ha tenido siempre todo el dinero, sino que fui a un tío mío que trabajaba en el Santander para ello, ya que no tendría dificultades en encontrar cajeros y sucursales del Santander a donde me iba. Al poco recuerdo que anunciaron a bombo y platillo que pasaban a cobrar 0 euros de comisiones para siempre, sin condiciones y blablabla... Y yo tan contento.
Eso de los cero euros de comisiones para siempre duró poco, pero más o menos lo he ido manteniendo teniendo mi nómina domiciliada y unos cuantos recibos. Ahora tampoco es suficiente con eso: me obligan a contratar un plan de pensiones, o a llevarme allá la hipoteca, o a tener un fondo de inversión... o si no me cobrarán 10 o 20 euros al mes de comisión.
Pues me temo que hasta aquí hemos llegado. He tenido malas experiencias en otras entidades bancarias (el ING supuso una gran decepción, el banco donde abrí la hipoteca cerró en España, luego compró sus restos una caja rural, ahora se llama Eurocaja rural y no estoy precisamente contento con ellos...).
Pienso en llevármelo todo al BBVA, por eso de que si el pez es grande habrá menos posibilidades de que me crujan a comisiones o de que el banco se vaya al garete, pero aún no lo he decidido.
Después de todo, al final la banca siempre gana
